Como sabrás si has leído nuestro anterior artículo sobre “Los tipos de sensores en el motor y sus principales características”, el corazón de todo vehículo está compuesto por una amplia red de este tipo de elementos, responsables de monitorear y regular una gran cantidad de funciones esenciales.

Desde el sensor de oxígeno hasta el sensor de posición del cigüeñal o de presión de aceite, cada uno tiene una función única y relevante en el funcionamiento del vehículo ¿Cómo influyen estos dispositivos en la respuesta del motor y eficiencia del combustible? ¿Qué pasa si alguno de ellos falla o se avería?

Como en cualquier otro componente del coche, son muchos los problemas que pueden surgir en los sensores del motor, debiendo de sustituirlos en caso de averiarse o presentar fallos que afecten al funcionamiento general del vehículo ¿Te encuentras en esta situación?

En el contenido de hoy, y teniendo en cuenta lo mencionado en esta introducción, analizaremos los pasos que se han de seguir para realizar su cambio y el coste derivado de esta reparación ¡Sigue leyendo para obtener la información que necesitas!

Siendo componentes del sistema de escape del automóvil, los sensores de oxígeno son los principales responsables de ajustar la mezcla aire-combustible. Al medir la cantidad de oxígeno presente en los gases de escape, proporcionan información a la unidad de control del motor (ECU), permitiéndole optimizar la combustión y reducir las emisiones.

Ahora bien ¿Qué ocurre si se dañan o presentan obstrucciones? ¿Cuáles son los pasos que se han de seguir para sustituirlos? ¡Te los mostramos ya!

Pasos para cambiar los sensores de oxígeno

Si has presenciado un problema en los sensores de oxígeno y quieres realizar su cambio por cuenta propia, te recomendamos seguir esta guía:

• Antes de empezar, localiza la posición de los sensores de oxígeno en el sistema de escape. Generalmente, los hay antes y después del convertidor catalítico.
• Por seguridad, desconecta la batería para evitar cortocircuitos. Afloja el terminal negativo con una llave adecuada y aísla la conexión.
• Utiliza una llave especializada para desenroscar los sensores antiguos. Ten cuidado de no dañar los cables durante este proceso. Antes de hacerlo puedes rociar un poco de aceite para ayudar a la extracción.
• Inserta con precaución los nuevos sensores en las roscas del sistema de escape. Asegúrate de seguir las indicaciones del fabricante respecto al uso de lubricante.
• Conecta los cables correctamente a la toma correspondiente. Asegúrate de que los conectores estén seguros y bien sellados.
• Reanuda la conexión de la batería, apretando el terminal negativo y verificando que todo esté bien asegurado antes de volver a poner en marcha el vehículo.

¿Ya lo tienes todo? Ahora te aconsejamos arrancar el motor y realizar una prueba de conducción para permitir que la ECU ajuste la mezcla de combustible. Observa cualquier indicación de problemas y realiza ajustes si es necesario.

Y recuerda que, en caso de no saber si es el sensor de oxígeno es el elemento averiado, es importante utilizar un escáner OBD2, conectándolo al coche y recuperando los códigos de error.

¿Cuánto es el precio?

El coste de cambiar los sensores de oxígeno puede variar según la marca del vehículo, la calidad de los sensores, y si optas por realizar el cambio por cuenta propia o recurrir a un taller mecánico.

En términos generales, y siempre que realices el cambio por cuenta propia, el precio por sensor puede oscilar entre los 100 y los 200 euros.

Generalmente ubicados en el sistema de refrigeración del vehículo, los sensores del refrigerante monitorean la temperatura del líquido y transmiten esta información a la unidad de control del motor (ECU).

La ECU utiliza estos datos para regular la mezcla de combustible y el tiempo de encendido, asegurando que el motor funcione dentro de rangos de temperatura óptimos, siendo de elevada importancia su correcto funcionamiento y revisiones.

Pasos para cambiar los sensores de temperatura del anticongelante

A continuación, y por último, te mostramos la guía definitiva para sustituir el sensor de temperatura refrigerante del motor ¡Sigue leyendo para descubrirlo!

• Encuentra la posición de los sensores de temperatura del refrigerante en tu sistema de refrigeración. Pueden encontrarse en el radiador, en la culata del motor o en la tubería del anticongelante.
• Desconecta la batería y drena el líquido refrigerante para evitar derrames. Utiliza una cubeta para recolectar el fluido y asegúrate de desecharlo de manera responsable.
• Accede al sensor y recuerda que, dependiendo de su ubicación, puede ser necesario retirar piezas como la tapa del motor.
• Retira el antiguo sensor con cuidado para no dañar los cables y observa la posición del conector para una reconexión sin problemas. Todo seguido, introduce el nuevo sensor en su posición original.
• Conecta los cables del nuevo sensor y, una vez instalado, rellena el sistema con el refrigerante previamente drenado. Verifica el nivel y la mezcla del líquido según las especificaciones del fabricante.
• Por último, vuelve a conectar la batería apretando el terminal negativo y confirmando que todo este correcto antes de arrancar el automóvil.

¡Ya casi lo tienes! Por último, y desde RO-DES Recambios, te recomendamos realizar una prueba de conducción para asegurarte de que la ECU ajuste correctamente la mezcla y el tiempo de encendido.

¿Cuánto cuesta?

El precio de un sensor de temperatura de refrigerante para coche puede fluctuar desde los 20 a los 80 euros por sensor, dependiendo de la calidad de los mismos, el tipo de pieza escogida y el vehículo con el que circules.

Ubicados en el motor del automóvil, los sensores de posición del cigüeñal son los principales responsables de monitorear la posición y velocidad de rotación del cigüeñal, proporcionando datos cruciales a la unidad de control del motor (ECU).

Una vez se recibe la información, la ECU la usa para sincronizar el encendido y la inyección del combustible, asegurado con ello la eficiencia y prestaciones del motor. Por la importancia de estos sensores y sus funciones, entender los pasos para su reemplazo se vuelve una tarea esencial ¿Te gustaría conocerlos?

Pasos para cambiar los sensores de posición de cigüeñal

Para sustituir los sensores de posición del cigüeñal por cuenta propia y de forma efectiva, deberás de:

• Localiza su posición en el vehículo. Estos suelen estar ubicados cerca del cigüeñal, en la parte inferior del motor.
• Desconecta la batería para evitar cortocircuitos. Al igual que en el caso anterior, debes aflojar el terminal negativo con una llave y aislar la conexión.
• Accede a los sensores, esto dependerá del tipo de vehículo. En ciertos automóviles, es posible que necesites desmontar algún componente para acceder a los sensores. Para ello, utiliza herramientas adecuadas y asegura el automóvil con gatos o soportes.
• Extrae los sensores antiguos con una llave o herramienta apropiada. Presta atención a la posición de los conectores para una reconexión sin problemas.
• Coloca con cuidado los nuevos sensores en la posición correcta, siguiendo las recomendaciones introducidas por el fabricante.
• Une los cables de los nuevos sensores a las tomas correspondientes y asegúrate de que los conectores estén bien asegurados y sellados.
• Vuelve a conectar la batería, confirmando que todo esté asegurado antes de arrancar nuevamente el vehículo.

Una vez realizado lo anterior, y como último paso, se recomienda conducir durante un tiempo y en diversas condiciones para permitir que la ECU ajuste la sincronización.

¿Cuánto cuesta?

En función de la calidad de los sensores, la marca y modelo de vehículo que conduzcas y quien sea el responsable de realizar el cambio, el precio de los sensores de posición de cigüeñal pueden variar. Por lo general, el precio por sensor va de los 50 a los 150 euros.

Los sensores de presión de aceite, ubicados cerca del filtro de aceite o bloque motor, monitorean constantemente la presión del aceite y transmiten esta información crucial a la unidad de control del motor (ECU).

La ECU, a su vez, utiliza estos datos para regular la presión del fluido, garantizando una lubricación adecuada de los componentes internos del motor y, por ende, el correcto funcionamiento de los mismos.

Pasos para cambiar los sensores de presión de aceite

Comprender los pasos para cambiar estos sensores es de elevada importancia si quieres prevenir el desgaste prematuro de las piezas del motor y mantener el funcionamiento eficientemente. Los pasos para hacerlo son:

• Ubicar el sensor de presión de aceite en el motor, generalmente localizado en el bloque motor o cerca del filtro de aceite. Todo seguido, se deberá de desconectar la batería.
• Retirar el filtro de aceite para acceder al sensor, en caso de ser necesario, y con la ayuda de los materiales específicos.
• Observar la posición del conector para su posterior instalación y, con cuidado de no estropear los cables y una llave concreta, retirar el sensor.
• Colocar el nuevo sensor en la posición exacta en la que estaba instalado el viejo y teniendo en cuenta las recomendaciones del fabricante.
• Conectar los cables del nuevo sensor a la toma correspondiente y volver a conectar la batería. No olvides confirmar que todo esté asegurado antes de volver a poner en marcha el vehículo.

Una vez sustituido el sensor de presión de aceite, y como en los casos anteriores, se recomienda comprobar el funcionamiento del mismo. Para ello, arranca el motor y observa la lectura de presión del aceite en el panel de instrumentos. Conduce durante un tiempo y verifica que se mantienen los rangos de presión.

¿Cuánto es el precio?

En función de la marca del vehículo, la calidad de los sensores y la elección entre piezas originales o de mercado de accesorios, el precio de un sensor de presión de aceite estará entre los 30 y 100 euros aproximadamente, sumándole la mano de obra en caso de realizarse en el taller.

Desde ajustar la mezcla de combustible hasta controlar la sincronización del encendido, los sensores son los ojos y oídos electrónicos que permiten que el motor funcione de manera eficiente y responda a diversas condiciones de circulación ¿Has tenido alguna experiencia inusual con estos elementos? ¿Te gustaría dejar tus dudas o comentarios? ¡Te esperamos a continuación!