Se denominan fusibles a los pequeños elementos presentes en el sistema eléctrico del vehículo cuya función consiste en proteger y accionar el funcionamiento de los distintos componentes que dependen del mismo, como pueden ser los incluidos en el sistema de alumbrado, los airbags o el aire acondicionado.

Por ello, si alguno de los sistemas eléctricos de tu deja de funcionar, puede que la causa sea una avería en cualquiera de los fusibles ¿Qué hacer en estos casos? ¿Debo acudir al taller si tengo un fusible fundido?

Como bien hemos dicho en la introducción de este artículo, los fusibles son unos pequeños dispositivos capaces de proteger el sistema eléctrico del automóvil, pudiendo llegar a ser el seguro de vida de alguno de sus elementos.

Tienen un tamaño inferior a la anchura de un dedo y destacan por la importancia que suponen para el vehículo, tal es esta que incluso los manuales de usuario de los vehículos incluyen un diagrama con la localización y función de cada uno de estos elementos.

Respecto a la ubicación en la que pueden estar, cabe decir que no es exacta, pues dependiendo de la marca y el modelo se encontrará en un sitio distinto:

• Debajo del volante: Pudiendo estar en el lateral derecho o izquierdo.
• En el capó del vehículo: Los fusibles pueden formar parte de los elementos que esconde el capó, estando ubicados cerca de la batería del vehículo.
• En la guantera: No como tal, pero sí que los encontrarás al retirar el cajón.
• En el túnel central: Para encontrar los fusibles en este caso, se deberá retirar algún embellecedor o hueco para objetos.

Su principal cometido es el de interrumpir la corriente en caso de que llegue o se acerque un amperaje peligroso, evitando daños en el sistema eléctrico del vehículo (que no aguantaría la intensidad de la corriente por si solo).

Los fusibles se componen de una lámina de estaño, plomo o cadmio presente en su interior, siendo esta la que se funde cuando la intensidad de corriente supera al máximo del fusible.

Dentro de este apartado podemos encontrar dos clasificaciones en lo que respecta al tipo de fusibles en nuestro automóvil, pues, dependiendo de una serie de factores, pueden ser de uno u otro tipo ¡Veámoslo!

Según los amperajes y colores

Como bien dijimos en nuestro artículo del Blog de Grupo RO-DES: “Se define como amperio a la unidad de medida de intensidad de la corriente eléctrica. Cuánto más potente sea un elemento para proteger, mayor será la intensidad soportada por el fusible”.

Podemos encontrar los siguientes tipos de fusibles según los colores y amperajes:

• Naranjas y 5 amperios: Son frecuentes en los claxon, sensores de aparcamiento o alarmas del vehículo.
• Rojos y 10 amperios: Se encargan de proteger el sistema de alumbrado y el cierre centralizado.
• Azules y 15 amperios: Se relacionan con el limpiaparabrisas, las luces de frenado y la bomba de combustible.
• Amarillos y 20 amperios: Se encargar de proteger funciones relacionadas con accesorios.
• Verdes, transparentes y ámbar de 30, 35 y 40 amperios: Su principal función es la de proteger el motor de arranque, el elevalunas y el climatizador.

Puedes consultar esta información en el manual de fabricante de tu vehículo, así como acudiendo a tu taller de confianza.

Según su forma

Podemos encontrar distintos tipos de fusibles según su forma y tamaño, siendo los siguientes:

• Fusibles muela: Tienen una forma cuadrada y la parte superior transparente, por lo que se puede ver fácilmente si estos están fundidos o en mal estado. Son frecuentes en circuitos de amperaje medio y alto y se encuentran, sobre todo, en los vehículos asiáticos.
• Fusibles cuchilla: Estos son “Los de toda la vida”, poseyendo una parte de plástico cuya función es la de proteger las conexiones y el filamento. Pueden llamarse gigantes, mini o normales según el tamaño que posean.
• Fusibles link: Tienen forma de placa con un tipo de arandela y son comúnmente utilizados en circuitos grandes. Por lo general se categorizan por calibre y no por amperaje.
• Fusibles cilindro: Típicos en vehículos con instalaciones o modificaciones posteriores a su fabricación, como en equipos de sonidos. Se categorizan según el amperaje que soportan y el calibre máximo del cable.

Los pasos que has de seguir para realizar el cambio o sustitución de los fusibles de tu vehículo son bien sencillos:

1. Ubícalos: Lo primero que debes hacer es saber la ubicación exacta en la que se encuentran estos elementos, puedes ver las posibles opciones en este mismo artículo.
2. Averigua cuál es el sistema o fusible que está fallando y el porqué de su rotura.
3. Retira el fusible dañado con la ayuda de unas pinzas especiales.
4. Reemplaza el fusible extraído por uno nuevo de semejante características.

Cómo puedes ver, el cambio de los fusibles del vehículo es una tarea sencilla que requiere de pocos pasos para hacerlo ¿Te atreves?

¿Por qué se funde un fusible? ¿Qué hacer en estos casos? 

Generalmente, los fusibles del coche se funden debido a un pico de tensión que puede ser producido por alguna avería en el sistema. Cuando esto pasa, generalmente es señal de que algo no va bien en nuestro automóvil.

Si esto ocurre, la función de proteger el sistema que tienen los fusibles no se llevará a cabo, pues la corriente responsable de esto deja de pasar la corriente necesaria a los elementos eléctricos.

De entre las causas que pueden provocar que un fusible se funda están:

• Una sobrecarga: La explicación de esto es que se está consumiendo más corriente de la esperada, pudiendo provocar que los cables del sistema se quemen.
• Un cortocircuito: Se trata de una conexión accidental entre cables de polaridades diferentes, indicando un error en los aislantes.

¿La mejor solución? Deberás realizar el cambio de los fusibles (explicado anteriormente), no sin antes comprobar qué es lo que está ocurriendo en el OBD del coche.

¿Cómo puedo comprobar el estado de los fusibles de mi coche? 

Lo primero que debes conocer es donde se encuentran los fusibles de tu vehículo, pudiendo ser debajo del volante del conductor o de la guantera, en las esquinas del vano motor o en los laterales del maletero.

¿Ya tienes ubicados los fusibles? Entonces ha llegado la hora de comprobar su estado. Para hacerlo, deberás determinar que es lo que está ocurriendo en el sistema y reconocer el fusible fundido. Hacerlo es muy sencillo, el fusible fundido será el que esté partido o quemado en su interior.

¿Ante qué casos debo ir al taller?

Si estás ante esta situación, desde RO-DES Recambios te aconsejamos acudir al taller para que comprueben el estado del sistema. Pues, aunque el cambio de este elemento sea una de las reparaciones que puedes hacer tu mismo, es importante que se realice una revisión profesional.

¿Qué pasará si lo sustituyo por uno de mayor o menor amperaje?

Si lo que quieres es cambiar el fusible del vehículo por uno de mayor amperaje, lo mejor que puedes hacer es tener en cuenta, en todo momento, las especificaciones que dicta el fabricante del vehículo sobre esto.

De no hacerlo, un fusible de mayor amperaje podría provocar una avería bastante grave en lo que respecta al sistema.

¿Cuál es el coste de un fusible para mi coche? 

Por lo general, los fusibles suelen venderse en packs de hasta ocho y diez unidades, siendo útiles para todo tipos de vehículos y elementos, como pueden ser los electrodomésticos.

Podemos encontrarlo en todo tipo de tiendas de repuestos, centros de automóvil, talleres oficiales e incluso en grandes superficies.

Su precio es relativamente económico, pues el pack completo puede costar entre los 4 y 8 euros.

Explicado todo lo relacionado con los fusibles del coche ¿Tienes alguna duda que podamos resolver? ¿Crees que serás capaz de realizar la sustitución de este elemento? ¡Déjanos tu opinión en comentarios!